jueves, 21 de mayo de 2015

Andanzas por España XIII : Alsasua y Cerco de Artajona

Estamos Loly y yo en Pamplona

Es domingo. Ojeé el horario de autobuses para considerar qué lugar de Navarra podíamos conocer en un día. Entre los pocos que había seleccioné Alsasua.

La Burundesa hace el recorrido Pamplona-Vitoria, pasando por Alsatzu (Alsasua). Salida: 11:00a.m. Llegada: 11:40 a.m. Carretera AP15.

Salimos de Pamplona y, tras pasar Aizcorbe, visualizamos una espectacular panorámica de las Sierras de Andía y Aralar. Posteriormente, van pasando como en diapositivas, los pueblos de Etxarren, Satrústegui, Inabar, Irañeta, Huarte Araquil, Arruazu, Lacuntza, Arbizu, Unanu, Etxarri Aranaz (Pueblo de Sor Cándida y Jesús Botanz), Lizarraga, Baikaku, Iturmendi, Urdiain y, por fin, Alsasua. El autobús le deja a uno en la calle, no hay estación, calle Idertzagain, nº2. Nadie en esta calle conoce su nombre.


Hace frío. Este pueblo tiene muy poco que ver. En el centro está el ayuntamiento, la Iglesia y algunas casas con sus plazas, de piedra, que evocan tiempos pasados. En la Plaza de la Iglesia está pintado, en grande, el escudo de ETA. Sobre la pared de la iglesia se lee con letras inmensas rojas: “Si los Obispos pariesen, el aborto Sacramento”


Comimos en el Restaurant……………..Con tiempo para no perder el autobús, nos dirigimos al nº2 de la calle Ydertzagain (En las afueras de la ciudad)

Con frío en el cuerpo y congelada el alma, abandonamos Alsasua.


Miércoles 1 de Abril de 2009: Cerco de Artajona.

Nuestros sobrinos Baztán- Madoz nos prepararon un inolvidable recorrido: Cerco de  Artajona-Puente Lareina. Nos llevó Ana Mari en su flamante todoterreno.
Pasamos por cerca de Mendigorría, mencionado en estos días, por haberse acondicionado para mostrar un extenso poblado romano. Llegamos a Artajona y pudimos apreciar detalladamente la grandiosidad de su Cerco.

 Nos esforzamos por apropiarnos, mediante fotos, de apreciadas partecitas de este coloso y recorrimos sus medievales calles, disfrutando del olor de su pasado.
Nos trasladamos a Puentelareina, disfrutando de sus antiguas calles bien conservadas, sobre todo la que nos comunica con el monumental puente románico, cuyas piedras nos recuerdan el Camino de Santiago. 

En la medieval calle, destaca, con luces propias, el restaurant Bidean. Abajo, una bodega fue convertida en Restaurant y todo él es muestra de decoración al estilo antiguo, sabiamente perjeñada.
Es un restaurant de altura. Íñigo y yo nos comprometimos con un cuarto de gorrino.

Jamás olvidaremos los buenos momentos que Ana, Raquel e Íñigo nos hicieron pasar.

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